Hay un aire distinto, es como si de las vitrinas saliera a nuestro encuentro el pasado y siento que poco a poco se cuela un ruido a magia, a esfuerzo compartido y a pasiones desatadas, es que estamos en el salón de los trofeos. Allí, junto al volante Alejandro Biondi y al defensa lateral Osvaldo Caro nos quedamos absorviendo historia. Revivimos por un instante aquellos momentos que marcaron no solo sus logros deportivos sino también el derrotero de las generaciones siguientes. Ellos integraron el primer equipo ganador de un campeonato de football para Rentas, el del año 1995.
El football de Rentas: ¿Han pasado 17 años desde que ganaron la primera copa para Rentas y abrieron un camino de gloria, que recuerdan de ese campeonato?
Alejandro Biondi: Recuerdo todo el proceso de entrenamiento, de cómo fuimos logrando un equipo competitivo. A favor teníamos una gran cantidad de muy buenos jugadores. Teníamos un muy buen arquero, una defensa sólida , muy buena recuperación del balón y unos delanteros letales pero por sobre todas las cosas mucho compañerismo. Creo que allí estuvo la clave de nuestro éxito.
Osvaldo Caro: todo comenzó en el año 1994 con una convocatoria a jugar el campeonato, nosotros ya veníamos jugando pero cada uno por su lado. Y luego de jugar unos cuantos partidos nos dimos cuenta que podíamos jugar como un equipo. Gracias a la visión de Emiliano Crespo, alma mater y organizador del equipo, llegamos a tener una muy buena actuación en el 94 y mas tarde obtener el campeonato del 95. El campeonato del 95 fue la consecuencia lógica de nuestros antecedentes.
EFR: ¿Desde qué momento se empezaron a sentir campeones o cayeron en la cuenta una vez logrado el mismo?
AB: Fue desde el comienzo ya que habíamos tenido la experiencia del año anterior donde el campeonato se nos escapó por muy poco. En esa oportunidad salimos terceros pero estábamos para campeonar. Por lo tanto arrancamos con la moral muy alta, sintiéndonos muy seguros de nuestras capacidades y de esa forma tuvimos un muy buen nivel de juego.
OC: te diría que yo no me di cuenta, sabes que pasa, ese campeonato lo ganamos de punta a punta, los resultados se fueron dando y cada partido (fueron 19) tenia el desenlace ideal.
EFR: Ese campeonato se definió por medio de un cuadrangular por lo tanto cada partido era una final. Como vivieron esos tres últimos partidos?
AB: Fue casi una experiencia religiosa, cada partido era definitorio y no podíamos si queríamos ser campeones dejar nada librado al azar. Todos los rivales fueron muy difíciles porque el nivel del torneo fue muy bueno.
OC: nosotros éramos un grupo que solo quería jugar y divertirse. Esto no significa que fuéramos una manga de irresponsables, tomamos todo con mucha seriedad pero siempre con la frescura y la alegría que nos daba el hecho de estar jugando juntos.
EFR: ¿Y cómo festejaron el logro del campeonato?
AB: Dimos la vuelta olímpica, nos la merecíamos, sin gozar al otro equipo y luego los festejos acostumbrados. Como premio tuvimos un viaje a Salto Uruguay donde enfrentamos a la gente de Rentas del vecino país. Fue un viaje bastante accidentado pero llegamos a tiempo. Ese campeonato y ese viaje los tengo entre los recuerdos mas preciados y te aseguro que si tuviera que volver a hacerlo lo haría con muchísimo gusto.
OC: Sí, en la cancha nos portamos bien, dimos la vuelta sin agrandarnos y después nos agasajamos con un asado de primera y tal como dice Alejandro ese fue un campeonato para volver a jugar e imposible de olvidar.
Jugador N° 12
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